El primero hace día el segundo Santa María El tercero San Blas, el cuarto San Nicolás, El quinto Santa Agueda,
el sexto Santa Dorotea, alza la pata y mea
Por San Blas la cigüeña veras y si no la vieres mal año esperes,
Si la Candelaria plora o llora, el invierno ya esta fora. Día 2 de febrero.
Febrerillo el corto un día peor que otro,
Febrerillo el revoltoso no paso de 28 si treinta tuviera nadie con el pudiera.
Febrero un rato al brasero y otro al humero,
Blas significa: “arma de la divinidad”.(año 316)
San Blas fue obispo de Sebaste, Armenia (al sur de Rusia).
Al principio ejercía la medicina, y aprovechaba de la gran influencia que le daba su calidad de excelente médico, para hablarles a sus pacientes en favor de Jesucristo y de su santa religión, y conseguir así muchos adeptos para el cristianismo.
Al conocer su gran santidad, el pueblo lo eligió obispo.
Cuando estalló la persecución de Diocleciano, se fue San Blas a esconderse en una cueva de la montaña, y desde allí dirigía y animaba a los cristianos perseguidos y por la noche bajaba a escondidas a la ciudad a ayudarles y a socorrer y consolar a los que estaban en las cárceles, y a llevarles la Sagrada Eucaristía. Se cuenta que acudió una madre que le curase a su hijo que se asfisiaba a causa de una espina de pescado que se le había atrabesado en la garganta. El santo lo curo con una señal de la cruz y una oración.
Aquí en Monteagudo de las Vicarias, cuando nacian tantos niños en el`pueblo en este día todas las madres iban a misa con sus niños por muy pequñitos que fueran y estaba permitido que llorasen todo que quisieran, pues tenían que besar la reliquia para que no los ahogara San Blas, se llevan a bendecir los rollos de San Blas, cosa típica de toda la vida. El Señor Cura los bendice y se reparten para toda la familia para que no los ahogue San Blas. Se tiene como abogado de enfermedades de garganta.San Blas fue obispo de Sebaste, Armenia (al sur de Rusia).
Al principio ejercía la medicina, y aprovechaba de la gran influencia que le daba su calidad de excelente médico, para hablarles a sus pacientes en favor de Jesucristo y de su santa religión, y conseguir así muchos adeptos para el cristianismo.
Al conocer su gran santidad, el pueblo lo eligió obispo.
Cuando estalló la persecución de Diocleciano, se fue San Blas a esconderse en una cueva de la montaña, y desde allí dirigía y animaba a los cristianos perseguidos y por la noche bajaba a escondidas a la ciudad a ayudarles y a socorrer y consolar a los que estaban en las cárceles, y a llevarles la Sagrada Eucaristía. Se cuenta que acudió una madre que le curase a su hijo que se asfisiaba a causa de una espina de pescado que se le había atrabesado en la garganta. El santo lo curo con una señal de la cruz y una oración.
No hay comentarios:
Publicar un comentario