Las Castañeras: un oficio en extinción. Era el personaje mas entrañable del invierno, quien no habrá comido en su niñez las famosas castañas asadas, y la castañera asándolas en plena calle y ofreciéndolas a la gente a los niños que para ellos eran un manjar, con su pañuelo en la cabeza y su delantal sucio, un modesto negocio en extinción, pero todavía subsiste en algunas ciudades, también en los pueblos los fruteros las venden y se asan en la cocina de casa pero creo que sabían mejor las de la castañera. mujer envejecida y con el rostro tiznado. Su característico olor y el calorcito al acercarte a comprarlas se calentaban las manos se sentaban en un banco las parejas y se las comían calentitas.Los niños Disfrutaban de lo lindo, creo que es una pena que desaparezca este oficio.
Las Castañeras: un oficio en extinción. Era el personaje mas entrañable del invierno, quien no habrá comido en su niñez las famosas castañas asadas, y la castañera asándolas en plena calle y ofreciéndolas a la gente a los niños que para ellos eran un manjar, con su pañuelo en la cabeza y su delantal sucio, un modesto negocio en extinción, pero todavía subsiste en algunas ciudades, también en los pueblos los fruteros las venden y se asan en la cocina de casa pero creo que sabían mejor las de la castañera. mujer envejecida y con el rostro tiznado. Su característico olor y el calorcito al acercarte a comprarlas se calentaban las manos se sentaban en un banco las parejas y se las comían calentitas.Los niños Disfrutaban de lo lindo, creo que es una pena que desaparezca este oficio.
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