Día 15 de febrero, ultimo día de caza mayor, con que alegría disfrutan los cazadores en Monteagudo de las Vicarias, son 20 y tantos entre ellos 3 señoritas muy atrevidas que les gusta ir de caza.
Ven un choncete pega un trote y se mete a una zona de monte más cerrado, como no había muchas más cosas que hacer, le siguen, ¡Son tan majos!. Al cabo de unos minutos siguiéndole la pista v al resto de la pandilla, ya me extrañaba a mi que ese andase solo. Que alegría me da verlos ya que este año no se están viendo muchos jabalíes, ¡Me ha alegrado la mañana!.Al cabo de un rato oigo un ciervo berrear bastante lejos, en el fondo de un barran quito, así que poco a poco me dirijo hacía allí. No para de ladrar, además de forma muy seguida, tiene pinta de ser una cierva que ha perdido el cervatillo Por fin me acerco lo suficiente para ver lo que es, una hembra. Que angustia, lleva ya media hora ladrando casi sin parar, creo que algún raposo, o tal vez algún perro se ha metido un buen desayuno. Que pena...
Así con sus hazañas se han terminado la cacería con dos ciervos y un jabalí, uno de los ciervos es precioso con
una cornamenta de cinco puntas, el que lo ha matado se lleva la cabeza y para el es un orgullo semejante trofeo,
Vienen para casa los descargan en el pabellón y la gente acude a verlos se ponen muy contentos pues ha sido el ultimo día de caza.
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