En mi niñez era fiesta todo el día, la misa por la mañana, en el ofertorio, el sacerdote se cogía una palancana con agua, se ponían los niños en un banco 12 niños representando los discípulos de Jesús y les lavaba los pies, entretanto las niñas cantábamos la siguiente canción.
Cual humilde y amoroso
tomo una blanca tohalla
el Señor y puesto al hombro
una vacía con agua,
Púsose a los pies de Pedro
el Señor para lavarle
y al punto arrojose al suelo
diciendo maestro amado,
le miro el Señor y dijo
si no te dejas lavar
no me tendrás por amigo
y menos podrás gozar
conmigo en el paraíso,
al punto arrojose al suelo
diciendo lava mis pies
y todo mi cuerpo lava
señor aquí me tenéis,
os pido mi redentor
aunque tan ingrato e sido
me escucharais si os pido
misericordia señor.
Cuando encendían las velas del monumento, bajaban el sagrario Con el Palio cantando.
Cantemos al amor de los amores
cantemos al Señor
Dios esta aquí
venid adoradores
adoremos a Cristo Redentor.
Gloria a cristo Jesús
Cielos y tierras
bendecid al Señor
honor y gloria a ti
Rey de la Gloria
amor por siempre a ti
Dios del amor.
y se ponían 2 Señoras a adorar al señor, se relevan cada media hora así hasta la procesión del Viernes Santo. Las niñas con una navajilla limpiando la cera que caía.
Se cantaba la canción siguiente.
De las Virtudes a no dudar
que la mas Bella es la Caridad.
y Dios el premio mejor dará
al que tuviere mas Caridad.
El pobre y desvalido
que implora compasión
Oh fieles no olvidemos
Que hermano nuestro es
y que de socorrerle
tenemos el deber.(Bis)
El que da su perfume a las flores
y a las aves su rápido vuelo
el que da su hermosura a los Cielos
Por el hombre a morir fue a la cruz,
Entre turbas furiosas le aclaman
entre voces y grandes turmultos
carcajadas blasfemias e insultos
por doquiera se escuchan ali.
Y María que a su hijo buscaba
con la cruz le ve ya casi muerto
de sudor y de sangre cubierto
hasta el monte Calvario subir.
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