Migas De los abuelos

Migas de nuestros abuelos, cuando las cabras se secaban no daban leche entonces toda la gente del pueblo se desayunaban con una sartén de migas para toda la familia. Quién no ha almorzado migas, muchas veces, y antes de salir al tajo: sembrar, alzar, ir a las tainas, a la era, a los huertos, al lavadero, a la escuela, a misa... en la sartén misma que se hicieron, bajo la campana de la chimenea, en la cocina aldeana,

El día anterior por la noche se picaban las migas, se remojaban con agua se les ponía un poco de sal y se cubrían con una rodilla o paño de cocina fuerte, a la mañana siguiente estaban esponjosas y blanditas, en el hogar de la cocina se ponía una sartén de patas se echaba aceite de los chorizos en adobo o algo de manteca del cerdo del entresijo, se fríen los ajos sin que se quemen, se echa un puñado de las migas preparadas y el pimentón para que no se queme, y se mueve con la rasera se añaden todas las migas y a moverlas vueltas y mas vueltas a fuego lento para que no se tuesten demasiado y al mismo tiempo se pican bien finas con la rasera, también decían que si se picaban gordas que a los ocho días se tentaban por las costillas. Se puede echar chorizo picado o panceta frita anteriormente, muy importante echarles granos de uvas.